Ideas de inversión

Sin electricidad la economía no funciona

El CEO de Microsoft manifestaba la semana pasada en una entrevista que la principal limitación actual en el desarrollo de sus inversiones en Inteligencia Artificial no es la escasez de chips, sino la imposibilidad de conexión a la red eléctrica para recibir la electricidad que haga funcionar a los centros de datos.

Esta limitación de falta de disponibilidad de electricidad es un problema que también padece Europa, y especialmente España. Sin poder contar con suministro eléctrico, la mayoría de los nuevos proyectos económicos no se pueden poner en marcha. Esto afecta desde a una nueva instalación de cualquier industria a la construcción y entrega de viviendas, al desarrollo de centros logísticos o a la instalación de grandes centros de datos.

La capacidad de la red eléctrica es equivalente al aforo máximo de un museo. Dicho aforo determina la cantidad máxima de energía que se puede transportar y distribuir en la infraestructura eléctrica sin que la seguridad del sistema se ponga en riesgo.

Al igual que en un museo con un aforo máximo determinado, en el que no se deja entrar a nuevos visitantes hasta que no hayan salido algunos de los anteriores para no superar el aforo máximo de personas, la red eléctrica solo puede permitir un máximo de “tráfico” de electricidad. Una vez alcanzado dicho límite, no se aprueban nuevas solicitudes de acceso a la red hasta que se libere capacidad o se amplíe.



Los nudos de conexión son los puntos de la red eléctrica donde se enganchan los consumidores, tanto industrias, como oficinas y hogares, para recibir electricidad, y donde se enganchan las plantas de energía renovable para volcar la electricidad. Pues bien, más del 84% de todos los nudos de conexión existentes en España están saturados y no admiten nuevas conexiones.

Sin acceso a la red eléctrica, cualquier proyecto puede quedarse en el dique seco, aunque gran parte de la inversión se haya realizado ya. Esta situación, de no ponerse solución, puede demorar incluso años la puesta en marcha de nuevas inversiones industriales, centros de datos o incluso la promoción de viviendas. Incluso si la fábrica, el centro de datos o una promoción de viviendas están ya construidas, si no tienen acceso a la red no pueden ponerse en funcionamiento.

Las causas de haber llegado a esta situación de saturación son múltiples. Entre ellas:

- El fuerte aumento de las solicitudes de conexión a la red, tanto por parte de proyectos industriales como por plantas de energías renovables y de instalaciones para autoconsumo de electricidad. 

España cuenta con más de 1.400 parques eólicos, más de 63.000 instalaciones fotovoltaicas registradas y más de 300.000 instalaciones de autoconsumo (este último dato corresponde a 2023).

- La transición energética, con un boom de puesta en marcha de plantas de energía renovable. La red eléctrica, construida hace décadas, no fue diseñada pensando en el enorme desarrollo de energías renovables, con miles de plantas generadoras de energía con distintas ubicaciones. Antes del boom de estas energías renovables, la energía se generaba en pocas ubicaciones, todas ellas con acceso a la red eléctrica. Ahora, cada parque eólico o fotovoltaico en cualquier ubicación requiere una conexión a la red eléctrica.

Falta de inversiones. Claramente, la inversión en la red eléctrica, adaptándola a los requerimientos de la energía renovable y ampliando la capacidad de distribución, no ha ido al ritmo del crecimiento de la demanda.

El problema de la saturación de la red eléctrica no es único de España. Las limitaciones y los retrasos en el acceso a la red eléctrica ponen en peligro muchas inversiones industriales y dificultan incluso la promoción de viviendas, si finalmente no van a tener acceso a la red eléctrica.

Del mismo modo que cualquier proceso industrial puede tener cuellos de botella que limiten sus ventas, los países también pueden sufrir cuellos de botella que limiten su crecimiento económico. El más palpable hoy es la saturación de la red eléctrica.